EN LA PANDEMIA

LA NUEVA ESCUELA PARA LA VIDA

Para reflexionar

Es un momento único, un momento que nunca se repetirá;

Debes pensar y comprender las necesidades, emociones, realidades de los demás y al mismo tiempo, los aspectos individuales, sentimientos, deseos y sueños, para hacer que el mundo sea digno de nuestras vidas.

Nos despertarnos cada mañana y damos gracias por otro día de vida, y tratamos de hacer lo mejor en nuestras vidas, hacer lo que necesitas

En esta nueva construcción del pensamiento, el tener que contemplar a todos, como parte de mi vida.

Que mis decisiones y acciones deben ser adecuadas y medidas para no exponer a mi familia, amigos, y a los demás.

El saber que está realidad debe de estar presente en todas partes y en todo momento, para garantizar y desarrollar nuestras vidas con los retos actuales.

No basta con romper los patrones y reflexionar sobre cuáles son las causas que lo provocan, también hay que reprogramar nuestra mente para que aparezcan nuevos comportamientos y sentimientos, aceptando los nuevos límites, que nos llevan a conocernos y conocer a los que nos rodean.

¿Cómo ha cambiado en nuestro interior?, y, ¿Queremos cambiar?

Seguimos el mismo sendero, y, así regresaremos a la vida que conocemos y estamos acostumbrados, y, por lo tanto, regresar a pensar, sentir y actuar de la misma manera, como si nada hubiera pasado al resto de la vida.

Tal vez debemos analizar si las actitudes que teníamos no están funcionando, en nuestro pensamientos y sentimientos;

Tal vez lo que debemos desaparecer, lo que era, para nuestra vida, experiencias y comportamientos negativos;

El problema más grande que debemos soltar y que en repetidas ocasiones, no podemos evitar, es el aferrarnos en los comportamientos y experiencias que hemos formado durante año y creemos que se trata de nosotros mismos, de lo que nos identifica, como parte de la identidad personal.

Es un momento único, un momento que nunca se repetirá, y eso significa que tenemos este hecho, esta situación, para enfrentar cualquier cambio, y tartar de descubrir cómo nos relacionamos con el mundo y determinar en gran medida, si el éxito de nuestro deseos, aspiraciones, sueños, serán el fruto de futuras actitudes y comportamientos. 

Es el lugar ideal para forjar diferentes, valores y principios, que refuercen a nuestras experiencias, la alegría que simplemente no supimos como acceder a ella.

Estar dispuestos a descubrir que existen diferentes Lazos, acciones y decisiones, que podemos utilizar en nuestras experiencias cotidianas para traernos paz y satisfacción.

En muchas ocasiones algo tan sencillo como el amor y el perdón, nos dan la oportunidad y la libertad, de forjar esa comunicación necesaria, de una manera adecuada y por lo regular el expresar lo que sentimos, son el fundamento inicial.

A veces las manifestaciones más sutiles como el escuchar y atender a los demás, desarrollan los elementos indispensables para la convivencia y la paz.

Quizás la vida basada en las posesiones materiales y las representaciones exteriores, no son los elementos que te brindan felicidad.

Tal vez, las circunstancias no te permiten hacer lo que deseas o piensas, pero eso no es una razón para no vivir de una manera equilibrada y coherente, en la búsqueda de la felicidad y el éxito personal.

Será esta manera de vivir, que nos permite preguntarnos en el transcurso del día, si esa emoción, ese pensamiento, el estado en que vivimos cada momento del día, ¿es lo que deseo?

Cabe recordar que la felicidad no depende del tiempo y lugar donde la busquemos, es solo una manifestación natural de nuestras vidas, de nuestras propias decisiones, pensamiento y acciones.

Podemos expresarla como respuesta a una persona, un lugar, un momento;

Podemos sentir que surge de la risa, del llanto, hasta en el dolor y el sufrimiento;

La única constante para encontrarla es uno mismo, y solo cada uno de nosotros podemos acceded a ella, cuando así lo deseemos.

Es un momento único, un momento que nunca se repetirá.

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