Por
David Beltrán
Opinión
Como cualquier usuario de internet y sobre todo de las redes sociales, es fácil ser víctima de la Desinformación y de las Fake News.
En mi opinión en esta nueva realidad que surgió después de la Pandemia y su costo en vidas humanas.
Las consecuencias de la Desinformación o las Fake News, jamás se habían evidenciado tanto como lo hizo la Pandemia; otra de tantas cosas que cambio.
Surje una TENDENCIA, que jamás se había respaldado con tanto esfuerzo desde la misma opinión pública y está era la búsqueda de la “VERDAD”.
Uno buscaba la verdad en los medios de información y sus canales tradicionales; pero parece que estos los manejan como un concepto filosófico de su percepción.
Donde los grandes como el The New York Times y muchos otros, eran un símbolo, es ahora uno de dudas y muchas preguntas sin respuesta desde la opinión pública.
Esta tendencia está creciendo hoy en día, tratando las noticias falsas o sin pruebas, como reportajes.
Con el llamado de la libertad de expresión, algunos medios y sus representantes, ahora defienden a los que mienten y manipulan, con el argumento de que es el publico el que decide ver o creerle a alguien y poner su confianza en su persona, como la representación teórica del “si no, porque siguen viéndolo y no le cambian de canal”.
Como si dejara la responsabilidad de regular las mentiras desde los mismo usuarios y televidentes.
Pero entonces te topas con otra verdad, la mayoría de los medios masivos parece que tiene un mismo señor o dueño, entonces las opciones son limitadas, pero las mentiras son masivas.
Donde los medios tradicionales acusaban a internet de todo lo anterior, será ahora una tendencia la tarjeta de presentación con el dicho, “yo no soy reportero y no trabajo para algún medio”.
En un mundo donde la política utiliza la desinformación y las Fake News, para mejorar sus puntos de aprobación, en la guerra es un armas para debilitar o fortalecer una posición y en la economía para vender a mayor o comprar a menor costo.
Los youtubers e influencers la usan para mejorar sus visitas a un canal y usuarios de redes sociales la usan para mejorar una imagen social y buscar fama.
Muchos como víctimas de la Desinformación o las Fake News, te recomiendan “solo cree la mitad de lo que vez y escuchas” y te piden que te cuestiones, porque crees que quieren que lo “veas y escuches”.
Donde esos medios famosos y sus celebridades mediáticas en medios tradicionales y usuarios en redes, lo acompaña una oculta y enorme fortuna, está deja de ser un símbolo del éxito profesional y se transforma en la compra de su reputación e imagen; como un acto tradicional de la farándula, lo que hoy representan muchos medios de información, es un escenario y un guion, de un mensaje que representa al mejor postor.
Es aquí donde la transformación de la vida y la conciencia social se pone sobre la mesa y donde la fábula o cuento de “pepito y el lobo” empieza a determinar el futuro de las nuevas figuras públicas y el final de los conocidos millonarios de la información, que empiezan a sucumbir con sus medios.
Como la señal de que el cambio esta pasando y de que no lo están entendiendo.
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